sábado, 16 de febrero de 2013

El Ciempiés Humano (2009): Aberrante, en el peor de los sentidos.



Hay películas que están condenadas desde antes incluso de empezar a escribir el guion. El ciempiés humano es una de ellas. Probablemente a Tom Six se le ocurrió la idea en una noche de porros con un par de colegas. Así me imagino yo la escena:

-Tío, imagínate un ciempiés, pero en vez de un ciempiés, son personas.
-¡JAJAJAJAJAJA!
-¡Podrían ser personas! ¡No sé tío, unir a dos personas por el ojete y por la boca! ¡O a tres! ¿Te imaginas?
-¡Habría que hacer una película de eso!
-¡JAJAJA! ¡Sería brutal!

Hala, pues ya está el proyecto en marcha. La cosa es que a mí, como a todo el mundo, también se me ocurren subnormalidades cuando estoy con los amigos, y también digo: “Para una peli.” Pero ahí queda todo. Porque estoy de coña y sé que en realidad son ideas ridículas que dan, como mucho, para un chiste de dos minutos. Pero supongo que Six no dejó de drogarse hasta que terminó la película y no se dio cuenta de dónde se estaba metiendo. Para quien no conozca el argumento de la cinta, básicamente es ese: un científico chalado que secuestra a tres turistas y los une por el culo y por la boca para crear un “ciempiés humano”. Luego los quiere adiestrar y tal. Muy loco todo.


Vamos a suponer que Six quería ser provocador, quería superar todo lo hecho anteriormente con una sobredosis de morbo enfermizo. Hasta ahí no tengo quejas, oye. Incluso me parece bien. La putada viene cuando se acobarda. Cuando minimiza las escenas, ignora las posibilidades, omite la sangre en gran medida y le pone las vendas a la última pieza del ciempiés, ya que, dado que se usan para proteger las heridas y la segunda chica no ha sido operada en el culo, no deberían ser necesarias. Vamos, pienso yo. Pero aquí el director se vuelve pudoroso, y parece ser que enseñar un coño es demasiado escandaloso. También se echa para atrás a la hora de enseñar el momento “oh mierda, tengo que cagar” (frasaza, por cierto). Ya, ya, si lo hubiera enseñado, habría sido repugnante y enormemente perturbador. Pero me pregunto yo: ¿No debería ser ese el objetivo de la película?

AQUÍ LLEGAN LOS SPOILERS, AVISADOS QUEDÁIS:

Puede que sea "médicamente precisa", como dicen, pero eso no impide que el guion sea una abominación de principio a fin. Lo que ya he definido como un chiste de dos minutos se alarga durante cerca de una puta hora y media plagada de escenas largas, absurdas y carentes de sentido. Algunos ejemplos:

-La chica que intenta huir cuando el doctor está ya anestesiando a su amiga y no antes. Tengamos en cuenta que mientras ellas están atadas, el doctor se va de caza con tranquilidad y luego vuelve ya con el chino (o japonés o lo que sea), pero lo de morder las ataduras no se les ocurre en todo ese tiempo. Y no son rubias, ojo ahí.

-El policía ve a su amigo muerto en la piscina y, en lugar de echar un ojo por la habitación y asegurarse de que Heiter no está por ahí con una pistola (es que ni siquiera se molesta en esconderse), se dirige corriendo hacia la piscina gritando: “¡Voller, Voller!” EN SERIO, ¿QUÉ MIERDA DE POLICÍA ES ESTE? Y luego se habla de la eficacia alemana.

-Uno que me hizo gracia: El médico loco poniéndose gafas de sol para salir un momento al patio en un día nublado. Qué mas da, está loco. Y es un fucker, además.


Las actuaciones son mediocres. Alguien debería enseñarle a Dieter Laser (el Dr. Heiter) que para hacer de loco no siempre es necesario sobreactuar. Las chicas, por su parte, no destacan en absoluto, y el chino (o japonés o lo que sea) solo se dedica a berrear. Aunque bueno, dadas las circunstancias tampoco vamos a echárselo en cara.

En cuanto al apartado técnico, sería relativamente salvable si no fuera por un par de errores imperdonables que suceden durante los cinco primeros minutos, en la escena del accidente del coche. Que faltan fotogramas, joder, y otros se repiten. Es que ni la edición la han sabido hacer bien.


Conclusión: Como película de terror, no da miedo, y solo es perturbadora en momentos muy puntuales. Como película gore, le falta muchísima sangre. Como comedia, hace gracia durante escasas escenas, y en la mayoría de los casos, de forma inintencionada. Como crítica a los experimentos nazis, queda eclipsada por lo descabellado de la propuesta. Como obra transgresora, se atreve en la teoría y se acobarda en la práctica. Y como película en general, es un insulto al buen hacer. En resumen, El ciempiés humano fracasa estrepitosamente en absolutamente todo lo que se propone. He visto muchas películas malas, pero como esta, pocas.

Puntuación: 2.00/10

1 comentario: