sábado, 30 de julio de 2016

Jason Bourne (2016): Misma fórmula, distinto resultado.


Hollywood lleva años saturando el mercado con infinidad de remakes, reinicios y continuaciones de películas y sagas míticas. Desgraciadamente, a pesar de honrosas excepciones, el nivel suele dejar mucho que desear y lo habitual es encontrarse con mediocridades que explotan sin ningún pudor el efecto nostalgia. Es por esto que me sentía algo desconfiado con la vuelta “oficial” de la saga Bourne a las salas de cine, no obstante, parecía que estaban tomando las decisiones adecuadas: un reparto de lujo formado por Alicia Vikander, Vincent Cassel y Tommy Lee Jones que acompañarían a Matt Damon en su regreso como protagonista a la saga que alcanzó su máximo esplendor con Paul Greengrass, que también repetiría en la dirección. Sonaba genial.