sábado, 20 de abril de 2013

Oblivion (2013)


                  

Cuando vi esta película anunciada, tuve cierta esperanza en ese abandonado mundo de la ciencia ficción. Es irónico que las películas de antes, aun con menos capacidad para sorprendernos visualmente, despertaban la imaginación de tal forma que el espectador quedaba atrapado en ese universo fantástico que se presentaba. Quizás hoy en día estamos tan acostumbrados a los avances visuales que cuando quieren hacer una película sobre ciencia-ficción, tienen que presentarnos más historia y buen argumento que otra cosa.


En el caso de Oblivion nos presentan ambas cosas pero a medias. No digo que sea un producto inacabado en absoluto. Es un producto que entretiene y ya está.  Y es que parece que las películas de este género no acaban de cuajar en estos tiempos. Tienen los presupuestos, el material, los efectos, los ingenieros, los actores que como en esta ocasión forman un gran reparto, y el director de TRON: Legacy, que bien es cierto que no es una película de 10, pero podrían haber sacado un buen material. ¿Qué es lo que falla? Como siempre, la historia.
            
                                    




Nos hallamos en el año 2073, donde hace más de 60 años la tierra fue atacada por alienígenas. Como nos hacen ver en los trailer y al principio del film, los humanos ganan la guerra pero la mitad del planeta queda destruido, inhabitable para la mayoría de los humanos, quienes buscan su hueco ahora en el espacio. Tenemos a Jack Harper (Tom Cruise), con un nombre molón  que puede ser un gran personaje principal para una historia de ciencia-ficción como esta. Y la verdad, no lo hace mal. Como casi toda película del bueno de Tom, nos consigue entretener aprovechando para enseñarnos su cincuentón cuerpo y seguir diciendo "estoy más bueno que tú". 


Nos colocan en la tierra mostrándonos a Jack como ingeniero de Drones que patrulla diariamente los cielos como parte de su misión, así un buen rato, porque la película es lenta (no esperéis mucha acción), hasta que una misteriosa nave cae del cielo y Jack se acerca a investigar. Es aquí donde entra Julia (Olga Kurylenko), y la cosa se empieza a complicar.
  
                                   




Los personajes que aparecen en la película personalmente opino que no están bien construidos. Por un lado tenemos a Tom dándolo todo, y por otro una Olga que más bien aporta poco y un Morgan Freeman de relleno, quedando la cosa un poco descuadrada. Entretanto la historia nos crea una leve curiosidad, no inmensa, pero suficiente para ir tirando las dos eternas horas que dura el film y entretenernos. El argumento está bien elaborado y desarrollado de una forma personalmente inteligente. Quizás demasiado personal, ya que la película puede acabar siendo confusa excepto para su creador y los más avispados de la sala. Su ambición puede con ella.


Acabamos teniendo un producto que tira más del apartado visual (como siempre) que otra cosa, no llegando a transmitir ningún mensaje en especial. Mensaje que a día de hoy hace falta que las películas transmitan, y que en antaño, era la principal baza de todo el film cuando no tenían esos efectos especiales.


Conclusión:

Estamos ante un film que cumple su misión de entretener al espectador, con grandes efectos visuales y una estética destacable. Que te hará disfrutar mientras estás sentado en la butaca, pero que tras levantarte y charlar un poco con tus amig@s para ver si han pillado bien el argumento, caerá en el olvido.




Puntuación: 6,5 de 10

No hay comentarios:

Publicar un comentario